La lógica del absurdo como expresión jurídica del sistema demoliberal al servicio del redentorismo sionista… Barak Obama dijo hace poco que los palestinos NO DEBÍAN solicitar el reconocimiento como Estado Miembro de la ONU, en forma directa. En la misma Asamblea del organismo internacional de naciones, dijo, sin otro argumento que el de expresarse como Presidente de EE.UU., que LO CORRECTO era que llegasen “NEGOCIANDO” con Israel, que ya es Estado miembro por interpósito apoyo norteamericano. De lo contrario, USA haría uso de la “potestad” de su veto para que la solicitud palestina no fuese considerada.
Pero haciendo un poco de historia, y de paso refrescarle la memoria al presidente norteamericano: ¿Cómo llegó a ser Estado la actual República de Israel?
¡Pues por una resolución de la misma ONU el año 1948! Resolución la cual, además, ESTABLECIÓ EL DERECHO DE LOS PALESTINOS A TENER SU PROPIO ESTADO, un Estado en un territorio que ya ocupaban como nación por cientos de años, incluso considerada como tal durante el Imperio Turco y el mismo Imperio Británico cuando lo puso bajo su “Protectorado” después de la Primera Guerra Mundial.
Así dadas las cosas, no queda otra acción que preguntarle -en forma inocente- al presidente norteamericano: ¿Por qué entonces debe Palestina tener un trato diferente -y discriminatorio a todas luces- si la ONU ya estableció, en la misma resolución que creó el Estado Judío, el derecho de los palestinos a tener su propio Estado en dicho territorio?
Pero no hay otra respuesta que el silencio culposo de la concomitancia con una de las partes.
¿Tan mal está USA en su estado financiero que debe arrodillarse ante el poder del lobby sionista, y servir de simple testaferro para los intereses que éste tiene de poder y hegemonía mundial?
Está claro que la decisión de Obama sólo traerá más violencia en Medio Oriente y todo Occidente, pero él lo sabe y es que le sirve para mantener la psicosis anti islam para beneficio de la plutocracia norteamericana del petróleo y de las armas. No se trata de que tenga una "visión estrecha”: es la visión de la pérfida conveniencia de los Señores del Dinero en el mundo, visión que se acomoda a los intereses religiosos-ideológicos de un pequeño conglomerado racial que se siente superior y predestinado por acción divina a gobernar a los hombres en la tierra, y que son los verdaderos amos a los cuales rinden pleitesía estos Señores del Dinero.
El problema de que los palestinos tengan o no tengan un Estado, de que las naciones del tercer mundo puedan o no salir del sub-desarrollo, de que las culturas y las identidades de las naciones y los pueblos sufran un ataque constante para debilitarlas y destruirlas, de que cada día mueran treinta mil personas de hambre en el mundo, de que las guerras no terminen ni respeten mujeres ni niños, NO ES UN PROBLEMA MERAMENTE DE PODER ECONÓMICO, es esencialmente UN ASUNTO DE CONVICCION IDEO-LÓGICO-RELIGIOSO de un grupo pequeño que hará lo indecible para lograr sus nefastos sueños de predestinación divina y, para lo cual, se han adueñado del poder financiero, supeditando a éste toda la economía mundial y las clase políticas de la mayoría de las naciones y las plutocracias locales. Y la chilena no está ajena, claramente.